Superman: Son of Kal-El #6
«Comienzos»
Gionista: Tom Taylor. Dibujante: John Timms. Portada: John Timms. Portadas alternativas: Inhyuk Lee
Superman se ha recuperado del devastador ataque que sufrió. Tras los sucesos que cambiaron su vida en el número 5, Jon Kent y su nuevo aliado Jay Nakamura están listos para devolver el golpe. Están en curso de colisión con el tipo de poder que está acostumbrado a apartar los problemas del camino. Pero Superman no es tan fácil de aplastar.
Historia
Los adolescentes sin hogar son secuestrados en las calles de Blüdhaven y metidos en cajas de transporte para ser enviados a Gamorra.
En Smallville, Lois está furiosa por el hecho de que un simple fumigador haya podido destruir la granja de los Kent, bajo la protección del equipo de héroes más poderoso del universo. Lois jura vengarse y un avergonzado Batman se lame las heridas preguntando por Jon.
Superman (Jon), ahora de vuelta en Metrópolis y libre de la sobrecarga de energía, se toma un tiempo para cenar con Jay en lo alto del globo del Daily Planet. Jay se sincera sobre el hecho de que Henry Bendix haya usurpado a su propia madre como presidente de Gamorra. Le explica que su madre ha desaparecido, presuntamente muerta, y que los ciudadanos de Gamorra (incluido él mismo) se han convertido en conejillos de indias involuntarios en un programa de armas biológicas para supersoldados.
En un giro de los acontecimientos, Jon, Jay, Lois Lane y Robin irrumpen simultáneamente en los Laboratorios STAR para averiguar cómo se llevaron a Fault Line. Descubren que el embajador de Gamorra estaba implicado y Superman (Jon) se apresura a interceptar el carguero en el que parte. Superman (Jon) encuentra a los adolescentes secuestrados y, junto con el embajador, los devuelve a Metrópolis mientras un misterioso enemigo se encarga de dar la noticia del fracaso a Bendix. El presidente Bendix, que debería estar molesto, está más interesado en su nueva alianza con Lex Luthor y en los resultados de sus experimentos que llama… The Rising.
Opinión
Superman: Son of Kal-El #6 da un giro hacia atrás para conectar con la «acción» de las cosas, específicamente el ataque a la granja de los Kent, y pone de relieve el conflicto que se está gestando entre Jon y Bendix, al tiempo que incorpora otras figuras, como Lois Lane y Robin.
Aunque sería fácil descartar esto como una simple exposición, hay muchos matices en la forma en que se establecen las cosas y tenemos un sentido mucho más fuerte de cómo las partes individuales funcionan juntas.
No se trata de relleno, sino de tejido conectivo, bien escrito y presentado con un arte muy bueno.
Timms es el artista perfecto para este cómic, y cada número sigue demostrando por qué. Hace un trabajo tan bueno con los momentos tranquilos como con la acción, y la última página del laboratorio de Bendix tiene una pinta estupenda. Uno de sus mayores puntos fuertes es la emoción. Hace un gran trabajo capturando exactamente lo que cada personaje está sintiendo en cualquier escena, haciendo que el diálogo golpee mucho más fuerte.
Superman: Son of Kal-El #6 sirve como un fuerte recordatorio de que no todos los números de un cómic de superhéroes tienen que ser todo acción o tener algo en llamas para ser satisfactorio y digno y para que las cosas sigan adelante.
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