[Retro Reseñas] Reseña de Superman: Funeral por un amigo #10 (Último capítulo)

SUPERMAN: FUNERAL POR UN AMIGO #10

«Vida después de la muerte»

Guión: Jerry Ordway. Dibujo: Tom Grummett. Tintas: Doug Hazlewood. Color: Glenn Whitmore. Portada: Tom Grummett.

Pa Kent se debate entre la vida y la muerte, pero su alma emprende una busqueda a través del mundo de los espíritus que le permitirá alcanzar lo nunca imaginado: que el Último Hijo de Krypton se levante de entre los muertos

Nota:  El presente cómic reseñado corresponde a The Adventures of Superman #500 de fecha de publicación junio de 1993.

RESUMEN

Pa Kent se encuentra en estado crítico, los médicos han logrado que su corazón vuelva a latir, pero su alma ha abandonado el mundo de los vivos, adentrándose en un lugar tan desconocido como sorprendente, en el que encuentra a su hijo Clark acompañado de dos extraños kryptonianos que le impiden avanzar y se muestran impacientes porque el Último Hijo de Krypton los acompañe al más allá. Lois por su parte ha volado hasta Smallville alertada por Lana Lang.  En Metrópolis mientras tanto, Gangbuster se enfrenta a unos narcotraficantes sin saber que accidentalmente está entorpeciendo un operativo de la policía que se encontraba a punto de detener a los criminales. Gangbuster se ve obligado a huir por esto, pero es alcanzado por una bala perdida.

Pa Kent prosigue su busqueda, viéndose a sí mismo vestido con uniforme de soldado y encontrando a su paso a sus compañeros muertos en la Segunda Guerra Mundial, Jonathan no tiene clara la misión que debe de cumplir, de pronto encuentra a su hermano Harry, quien le dice que a quien está buscando se encuentra a dos horas de distancia de donde se encuentran. De pronto Pa Kent es atacado por un misterioso militar al que Jonathan golpea, diluyéndose en el aire al ser golpeado.

Jonathan sigue su camino, de pronto la tierra cede bajo sus piés y cae a un rincón del infierno en donde la diablesa llamada Blaze le ofrece recordar a quién busca a cambio de que la entregue su alma,  Pa Kent escapa encontrándose con la entidad llamada Kismet, quien le hace recordar que está buscando a su hijo Clark, para después alertarle de los peligros que le acechan en su misión.

Jonathan despierta en una pradera que resulta ser Krypton miles de años atrás, algo llama la atención del hombre y presencia un cortejo funebre en donde su hijo Clark es llevado por unos extraños kryptonianos de aspecto demoniaco. Pa Kent interrumpe la procesión, pero algunos de los kryptonianos comienzan a mostrar un aspecto diabólico. Clark parece escuchar las palabras de su padre y abre los ojos, dándose cuenta de que esos supuestos kryptonianos no son si no demonios con oscuras intenciones. Nuestro héroe se zafa de ellos y los ataca, derrotándolos finalmente. Pa Kent no se resigna a que su hijo se quede allí y le dice que no se resigne a morir y que vuelva junto a él al mundo de los vivos. Clark asume que su hora ha llegado, pero finalmente logra convencerlo a pesar de un nuevo demonio que con el aspecto de Jor-El trata de que nuestro héroe no abandone esa dimensión. Finalmente, Clark y Jonathan acceden a un extraño tunel que parece conducir al mundo de los vivos.

Segundos después Pa Kent despierta en el hospítal ante la sorpresa de los médicos y de Martha y Lois, Jonathan alterado solamente acierta a decir que ha conseguido traer a su hijo de vuelta, eso altera enormemente a Lois, la cual horas más tarde toma un avión de regreso a Metrópolis, pero el el vuelo lejos de ser plácido enerva aún más a la reportera cuando varios viajeros ven a través de las ventanillas a un hombre volador con una capa roja.

La reportera aterriza en la Ciudad del Mañana, en todas las televisiones del aeropuerto solamente se habla de una cosa: Superman ha sido visto en varios puntos del planeta realizando salvamentos y proezas. Lois no da crédito a lo que escucha, y minutos más tarde acompañada del inspector Henderson accede a la tumba del Hombre de Acero en donde atónita contempla como el feretro se encuentr vacío y no hay rastro alguno del cuerpo, finalizando así el cómic y la saga del funeral.

OPINIÓN

Punto final para la saga del funeral de Superman con un número en el que hemos visitado el más allá de la mano de un Pa Kent decidido a rescatar a su hijo de las garras de la muerte. Entretenidísimo capítulo en el que hemos visto a demonios, entidades cósmicas y a unos misteriosos seres diabólicos que por alguna oscura razón no permiten que Superman regrese al mundo de los vivos.

Pero como en todo buen cómic que se precie, los buenos triunfan y nuestro héroe parece estar de regreso, o al menos eso parece al producirse avistamientos del kryptoniano por toda la Tierra y hallarse su tumba vacía una vez más.

Resumiendo amigos: a partir de ahora empieza lo bueno, acción a raudales que reseñaremos en esta sección a partir de la próxima semana.

La parte gráfica en esta ocasión ha recaido en Tom Grummett, lo que es sinónimo de buen hacer.

Esto ha sido todo con respecto a este arco argumental, en siete días volveremos con el primer capítulo de «El Reinado de los Superhombres».

Hasta entonces, un cordial saludo.

Non.