Como el primer y más reconocido de los superhéroes, Superman sigue
siendo la cara más popular de una de las pocas creaciones »made in
América»… ¡el superhéroe!

Podemos hablar de su logo en forma de diamante con la mítica S, de sus
botas de color rojo brillante, de su capa, o de los »gayumbos» de
color rojo puestos por fuera. Pero el hecho es que Kal-El / Clark Kent /
Superman se ha convertido en un icono reconocido internacionalmente por
derecho propio.

Pero EE.UU. ha cambiado mucho desde 1938, y Superman y su rostro también han cambiado.

A diferencia de muchos de sus compatriotas, que se esconden detrás de
diferentes máscaras de estilo barroco, El Hombre de Acero todavía mira
el mundo desde detrás de la desconcertante simetría de un ídolo del cine
de 1930.

Los aspectos clave de su rostro no han cambiado en absoluto: la
fuerte mandíbula, los pómulos definidos, el mentón partido. El pelo, tan
imposiblemente negro, en sus principios los coloristas tuvieron que
poner reflejos azules para evitar que en los procesos de impresión se
vieran como manchas de tinta. Más corto, más largo o doblado, una cosa
sobre su peinado se mantiene constante… ¡el »rizo» en forma de S que
desciende de su cuero cabelludo!

La cara debajo de ese rizo tan característico es un lienzo en blanco
usado por diferentes artistas, a lo largo de casi 75 años, cada uno de
ellos puso su personalidad (y una gran parte de la sensibilidad cultural dominante) en su trabajo.

1. JIM LEE (2011)

Superman es el personaje más difícil de dibujar. Hay un par de
cosas que lo hacen difícil. Tiene un traje muy simple y no tiene una
larga capa como Batman. No es un personaje que está siempre en las
sombras, y no lleva una máscara. Él debe ser Superman. Debe ser la forma
más idealizada de todos los tiempos, así que debe lucir poderoso, pero
no puede parecer demasiado musculoso. Su rostro debe parecer noble,
atractivo y vigoroso. Es una guerra de sutilezas. Cada pequeño cambio en
el personaje hace una gran diferencia en como se ve finalmente.

Creo que lo borro más que lo dibujo para ser honesto. Es un personaje
que no lleva guantes y no tiene grandes botas, así que debes dibujar un
humano idealizado en un traje simple. Debe estar en una pose que sugiera
nobleza. Debe ser una pose que sugiera una forma idealizada, es difícil
de hacer. Batman está más agachado, está en las sombras y tiene poses
más dinámicas. Superman tiende a estar muy derecho y es muy simétrico, y
eso lo hace más difícil de dibujar».

La 1ª mirada del lector al Hombre de Acero de Jim Lee se adapta
perfectamente a nuestra edad moderna. Es más joven, más furioso y más
introspectivo. Este abandona las mallas por una especie de armadura. Ha
perdido sus »gayumbos» de color rojo.

Pero ahí, en ese rostro blanco, ¡inigualablemente guapo! está la sonrisa
icónica e irónica del creado por Joe Shuster. No la hemos visto desde
la Segunda Guerra Mundial, cuando se alisaron los bordes ásperos, en un
esfuerzo por transformarlo de un viajero irónico a un símbolo
patriótico… ¡pero ahí está, de nuevo en vigor!

Es muy pronto para decir qué significa exactamente la sonrisa. ¿Es
simplemente reírse de los malhechores? ¿Burlándose del peligro?

¿O es tan sólo posible, que seamos nosotros a los que él encuentra tan
divertidos (los humanos humildes e ineficaces) con los cuales él ha
cargado durante casi 75 años?

2. BRUCE TIMM (1996 – 2000)


Para Superman: The Animated Series (que se desarrolló entre
1996-2000) el artista Bruce Timm diseñó un héroe muy estilizado y
angular que rindió homenaje a los cortos Fleischer y al Hombre del
Mañana con amplia barbilla de John Byrne.

El rizo en forma de S se ha convertido en un garabato, los ojos una vez
más reducidos a simples puntos negros. Él no necesita de ojos
expresivos, este Superman está más cerca de la acción, sin palabras. O,
peor aún… ¡sin sentimientos!

3. CURT SAWN (1972)

En el momento en que los años 70 estaban en pleno auge, Curt Swan
seguía dibujando a Superman, y había empezado a dejar algunas de las
turbulencias de la época en la cara del Hombre de Acero. Su pelo negro
azulado creció, siendo un poquito más largo, pero sólo un poquito, ¡el
Último Hijo de Krypton no era hippie! Sus patillas comenzaron a
deslizarse más y más abajo en sus pómulos de granito, y el enfoque más
realista en los comics de la época significaba que los lectores
comenzaron a ver más líneas en su cara.

De pronto, Superman parecía más viejo, más agobiado por las
preocupaciones, ¡las que nunca tuvo! Las líneas culturales fueron
dibujadas y el nuevo Superman de Curt Swan estaba claramente del lado de
los padres, preocupados de la juventud »rebelde» de los Estados
Unidos…

4. GARY FRANK (2009)
Como si fuera una reacción al Hombre de Acero mega-mandibular de Ed
McGuinness, el artista Gary Frank regresó al fotorrealismo de su carrera
a finales del 2000 al ejecutar Action Comics y la mini-serie Superman:
Secret Origin. Fue más allá de eso, de hecho, se basó en buscar
conscientemente su versión sobre el fallecido Christopher Reeve.

Otros artístas de Superman parecen haber hecho brillar las páginas con
el poder puro y duro de otro mundo, mientras que el Superman de Gary
Frank en vez de eso irradia calor humano y compasión por completo…

5. JOHN BYRNE (1988)

En 1986, DC Comics hizo el relanzamiento de su universo, y reinició al Hombre de Acero con él.

El artista/escritor John Byrne creó un Superman más joven y más
dinámico, cuya inmensa línea en la mandíbula podría cortar queso.

Tengamos en cuenta que el super-peinado no es muy largo, pero si más alto, parece ligeramente engominado.

Damas y caballeros… ¡son los 80!

6. KURT SCHAFFENBERGER (1962)


En las páginas de la novia de Superman, Lois Lane, el Hombre de Acero
ha pasado más tiempo defendiéndose de su hambre por Lois (por los
avances del hombre) y los planes para exponer su identidad secreta, que
de las amenazas alienígenas o robots gigantes. Esto, exigía un Superman
romántico.

Kurt Schaffenberger sacó a Superman de ser sólo eso, con líneas limpias y
gruesas que le dan una apariencia fuerte, sencilla y segura que nos
recuerda a Cary Grant. La versión de Kurt Schaffenberger posiblemente
sea una de las más hermosas…

7. ED MCGUINNESS (2002)

En la década del 2000, el artista Ed McGuinness rechazó el
pseudo-realismo fotográfico de los comics y adoptó un enfoque
hiperestilizado de dibujos animados en la elaboración de Superman. La
musculatura del personaje se disparó de la que conociamos por defecto,
meramente esteroides que lo llevaban a lo anatómicamente imposible. Su
cuello se hizo tan espeso que amenazaba con consumir la cabeza. ¿Y qué
más podría tener que no tuviera? Ed McGuinness también le infló la línea
de la mandíbula para que actuase como un baluarte.

Los ojos se redujeron a ranuras, para compensarlo, convirtió las cejas
en un par de gruesas y enojadas »emes», la boca en una línea plana, un
espacio en blanco… ¡el icono se había convertido en la
iconografía!…

8. MAX FLEISCHER (1942)

En una serie de 17 cortos de dibujos animados en Technicolor
producida entre 1941 y 1943 por los estudios Fleischer, ¡el Hombre de
Acero llegó a la pantalla grande por 1ª vez! La animación de Superman
significó racionalizar algunos de sus elementos visuales, cómo su rizo
en forma de S convertido en una media luna simple.

Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial, el tiempo de formación
había terminado, era hora de ponerse serios. Las películas de animación
más tarde dieron un Superman más noble, más sobrio y más patriótico…

9. JOE SHUSTER (1938)

El primer artista de Superman fue su co-creador, Joe Shuster, que
realizó páginas a un ritmo acelerado para satisfacer la increíble
demanda a pesar de que su visión estaba cada vez peor.

La primera imagen del personaje era el de un sabelotodo que hablaba
mucho, por lo que Shuster le puso una sonrisa sardónica y aberturas en
los ojos. El mensaje… se trataba de un héroe que, literalmente, se
reía del peligro…

10. TOM GRUMMETT (1996)

Bueno, sí, vamos a seguir adelante dándole al Hombre de Acero un
respiro. Primero: era la década de los 90. Segundo: el hombre acababa de
morir y volver a la vida, lo cual parece justificar la barba en él, ¿o
no?

De todos modos, hemos de reconocer que no es algo de lo que alguien esté
orgulloso. Sin embargo, lo reconocemos y vamos a continuar…

11. CURT SWAN (1962)

El Superman del artista Curt Swan no era tan expresivo como el de
Wayne Boring, ni como el del republicano Eisenhower de Al Plastino. Curt
Swan dividió la diferencia, creando un Superman con una apariencia más
ilustrada y con menos estilo de dibujo animado. Quizás algo más hermoso
de un modo vago, pero no amenazante.

Tengamos en cuenta que el cabello de el Hombre de Acero parece haber
retrocedido un poco, desde sus primeros días. Aquí tenemos a un Superman
más parecido a su tío preferido…

12. AL PLASTINO (1958)

Después de la guerra, DC Comics llamó a varios artistas (Al Plastino,
Wayne Boring y Curt Swan, el principal de ellos) para que dibujaran a
Superman con regularidad. Al Plastino fue uno de los más prolíficos e
influyentes, su corte limpio del Hombre de Acero se parecía mucho a los
soldados que habían regresado a casa para formar una familia.

Atrás quedaban los ojos risueños, reemplazados por un par de ojos azules
penetrantes, capaces de transmitir la preocupación por todos nosotros,
sus cargas. Su Superman fue »el papá» de los Estados Unidos, aunque
era uno que optaba por las botas y una capa en vez de las zapatillas y
una pipa…

13. WAYNE BORING (1960)

A finales de los 50 y principios de los 60, un decreto editorial vino
a ampliar el universo de Superman, más allá de los ladrones de bancos y
los científicos locos. Así comenzó la era de la aventura del
espacio-tiempo, transformaciones grotescas y extrañeza profunda y
duradera (llegó Beppo el Super Mono). En la historia de un hito,
Superman viajó en el tiempo a un Krypton antes de que explotara, donde
conoció a sus padres condenados, se enamoró de una actriz y trabajó
febrilmente e inútilmente, para evitar la tragedia que lo creó. Douglas
Sirk podría haber dirigido la película.

Esta fue una época en la que los globos de los pensamientos de Superman
se llenaban de atragantamientos, sollozos y diversas pasiones ¡que no
se atrevía a expresar! El artista Wayne Boring, que había estado
trabajando en Superman por años (y, de hecho, ayudó a establecer la
imagen del Hombre de Acero en la posguerra) disfrutó de la tarea de
agregar alguna miel a la espectacularidad y profundizó en la frente de
Superman, le redujo la barbilla alargada y sus características, así que
todas aquellas expresiones super-melancólicas les llegó a los
lectores…

Fuente: 20 Minutos

Por Miss Lane

Diseñé miles de inventos revolucionarios que me habrían convertido en la mujer más rica del mundo… pero los guardé en Megaupload. Ahora dirijo esto a tiempo completo.

5 comentarios en «SUPERFACE: La Evolución del Rostro de Superman»
  1. el rostro que le pongan.. superman siempre sera superman.. felicitaciones a todos esos maravillosos ilustradores y dibujantes que lo han plasmado a lo largo de las decadas.

  2. ¡Saludos! Coincido con el usuario Groucho. El mejor de todos y más realista es el Superman de Alex Ross. El artista supo capturar la escencia del héroe de los 40's que impartía implacablemente justicia y el superhéroe introspectivo y que carga mucho tanto en su mente como sus hombros. Eso si sin desmerecer todos quienes le han ilustrado a través de los tiempos, ya que creo que al igual que un servidor, todos hemos disfrutado a través de los años cada encarnación tanto en la pantallas como en las historietas.
    Que estén muy bien y por cierto Lois me gusta mucho el banner del blog. ¡Un caluroso saludo a la distancia!

  3. Muy interesante, pero como siempre todo puede ser perfectible, me uno a la idea de que hace falta el Súperman de Alex Ross y además creo que un poco de orden (cronológico) ayudaría mucho a notar mejor la evolución en la forma de dibujar al gran boy scout.

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