Iniciamos una nueva sección en Mundo Superman que hemos llamado «El Rincón de Reeve», un espacio en el que pretendemos rendir homenaje al actor que en nuestra niñez nos hizo creer que un hombre podía volar.
Parafraseando a Jor-El en «Superman The Movie», en este reducto trataremos de buscar las respuestas juntos. En este caso, respuestas a situaciones y anécdotas que se produjeron desde el momento en el que un desconocido Christopher Reeve se hizo con la capa del Hombre de Acero, llevándose el gato al agua ante actores de talla mundial en la década de los 70.
CAPÍTULO I (El rostro de Superman)
Los productores de «Superman The Movie», Alexander e Illya Salkind, Pierre Spengler y Charles F. Greenlaw buscaban un actor de primera línea para dar vida al Hombre de Acero en la gran pantalla. Se barajaron nombres como Burt Reynolds, Paul Newman, Sylvester Stallone, Robert Redford e incluso Clint Eastwood.
Pero Richard Donner ante todo quería «veromismilitud». Años después, el director de la película afirmó que:
«Nadie creeria que Superman podría volar si el que volaba a traves de la pantalla era Paul Newman o Robert Redford, como deseaban los productores»
Un buen día, y tras enterarse del casting para la película se presentó a las audiciones un joven de 1,93 metros de altura llamado Christopher D’Olier Reeve, actor de teatro y de series de televisión.
El porte, y complexión física del actor, absolutamente similar a la de Superman convencieron inmediatamente a los responsables de casting de la película.
Tanto es así, que al finalizar la audición, el conductor que le llevaba de regreso al aeropuerto fue quien le reveló que había sido escogido para el papel:
«¿No lo sabe? Le han cogido. Usted es Superman.»
Para finalizar os dejamos con un vídeo en el que podemos ver las pruebas de pantalla protagonizadas por Christopher Reeve.
Banner de la sección realizado por Jesús Carballo.