Super Sons #10
«Un buen día»
Guión: Peter J. Tomasi. Lápices: José Luis. Portada: Jorge Jiménez. Portada alternativa: Dustin Nguyen
«¡“Sede secreta”! A raíz del «Planeta de las Capas», grandes cambios desafían tanto a Damian como a Jon, ya que Superboy se deleita con su nuevo poder y una decisión de Batman sacude el mundo de Robin para siempre. ¡Y como se prometió anteriormente, llega el debut de la nueva sede secreta de los Super Hijos!»
Resumen
Comenzamos con los chicos y sus padres en la Granja Kent en el Condado de Hamilton, Clark, Bruce y Damian orgullosamente observan como Jon demuestra que ahora tiene la capacidad de volar libremente por su propia voluntad. No más saltos.
En el viaje de regreso a la casa, Jon le dice a Damian que suba al techo del camión, con los brazos extendidos hacia adelante. Damian admite que es divertido volar.
Interludio: A través de los escombros del antiguo edificio del GCPD, un Batman cubierto de ceniza se levanta, sujetando un trozo de tela morado y verde arrancado, y dice: «El apocalipsis ha vuelto a encenderse, porque yo lo digo».
Más tarde esa noche, tanto Superman como Batman despiertan a sus hijos (en sus casas separadas) y les dicen que se vistan con su «ropa de trabajo».
Ellos viajan al fondo de la bahía de Metrópolis, a una estructura construida por Superman que servirá como la nueva sede del niño. Jon lo llama la «Fortaleza de la Actitud». Tanto Superman como Batman explican que, dado que los chicos trabajan juntos tan bien, son capaces de manejar amenazas de bajo nivel por sí solos, y que requerirían una base de operaciones. Batman también le revela a Damian que ya no será educado en casa por Alfred, y que asistirá a una escuela privada en Metrópolis con Jon.
Terminamos con los chicos recibiendo una alerta para su primera misión desde su nuevo cuartel general, un ataque de quimioterapia.
Opinión
No puedo expresar con palabras la cantidad de alegría que experimenté al leer este capítulo de Super Sons… Así que no tengo ni idea de cómo voy a hablar lo increíblemente divertido y satisfactorio que es este número. La única expresión que parece remotamente apropiada, sería abrazar a Tomasi. Ya sabéis, uno de esos largos, incómodos y cálidos abrazos que haces cuando estás feliz.
Si hay una cosa que siento que Rebirth ha hecho bien, es restaurar muchas de las relaciones que hicieron de DC Comics una grandiosa experiencia antes de The New 52. Hemos visto esto en varios títulos, pero especialmente en Superman y Super Sons. Hay algo sobre la dinámica de Clark, Lois y Jon que es contagioso… Y sea lo que sea, ¡está empezando a contagiarse Damian!
Durante casi un año, hemos observado como Damian y Jon se cruzaban en el camino, Damian influenció negativamente en Jon, los dos se volvieron compañeros de equipo, y finalmente desarrollaron una amistad mutua. Sus aventuras juntas han hecho que los dos se conviertan en los «Súper Hijos». ¿Qué pasa ahora? Pues que acaban de conseguir su propio cuartel general secreto, por supuesto.
Ambos chicos han demostrado a sus padres que se puede confiar en ellos, y se han ganado el privilegio de cierta independencia. Esto sin duda nos conducirá a interesantes y divertidas bromas, pero por ahora, simplemente nos deleitaremos con la alegría de este momento. Me atrevo a decir que es imposible leer este número sin sonreír.
Vamos a ser honestos, no es que suceda mucho en este número, y eso probablemente eche para atrás a muchos lectores. No necesito una tonelada de acción o peligro para encontrar un cómic bueno e interesante. Sólo necesito una buena historia con una buena escritura. ¿Sabes lo que Peter J. Tomasi nos da aquí? Una historia realmente buena con muy buena escritura. Desde el diálogo, pasando por el montaje, hasta las relaciones, este cómic parece como un viejo amigo con el que te estás poniendo al día durante una cena y unas copas. Hay algo en la dinámica de ciertos personajes que te ganan el favor. Desde Bruce y Clark, pasando por Dick y Wally, hasta Tim y Conner (incluso Booster y Beetle), ¡una vez que encuentres un dúo que funciona bien!
La página inicial captura todos estos elementos, y les prometo que esto es sólo la punta del iceberg. Así como Bruce y Clark se hacen mejores hombres, Damian y Jon también se hacen mejores. Es raro ver a Damian feliz, pero Jon, de alguna manera, logra hacerlo. Damian es tan duro que cuando vemos su humanidad brillar, es impactante. Hemos tenido vislumbres de ello con Bruce, y en un grado más fuerte con Dick, pero desde que Jon es un niño, llega a Damian en un nivel completamente diferente. Damian llega a «pagar por adelantado» con Jon. Lo que quiero decir con esto es que Dick sirvió como una increíble figura de «hermano mayor» para Damian, y Damian no sólo se lo está pasando a Jon, sino que está experimentando la alegría de servir en el papel de hermano mayor. Es lo que hace de Dick un personaje tan entrañable, y añade elementos de inigualable dinamismo y complejidad (de una manera positiva) a Bruce y Clark al hacerlos padres.
Jorge Jiménez normalmente cubre el arte de Super Sons, así que me sentí un poco decepcionada cuando vi a otro artista para este número. Pero también me he hecho fan de José Luis. No estoy familiarizada con él. Dicho esto, he tomado nota de él ahora. Hay un tono alegre en su trabajo, y sería perfecto para algo como Teen Titans. Admitiré que hay algunas inconsistencias de panel a panel, pero son leves.
