El pasado 5 de abril se estrenó en cines «Shazam!», en Mundo Superman hemos querido dejar un tiempo prudencial de dos semanas y así que todo el mundo pudiera acudir a los cines para su visionado para con el presente artículo analizar la película y poder comentarla con total tranquilidad…
«SHAZAM!»
Érase una vez un secundario de lujo que sin saberlo junto con el Aquaman de Jason Momoa salvó el DCEU…
Así es como yo entiendo esta película protagonizada por Zachary Levi y que lleva por título “Shazam!”. Una cinta afortunadamente alejada cien por cien del brutal realismo de Nolan, alejada de las espectaculares y a la vez inconexas puestas en escena de Zack Snyder y que no copia en absoluto los parámetros Marvel.
Reflejándose en la ochentera Big, “Shazam!” no sé si nos trae una comedia con tintes superheroicos o una película de superhéroes con mucho mucho humor y un trasfondo familiar que bien pudiera incluso considerarse una típica cinta de consumo en fechas navideñas.
A partir de ahí, la cinta es disfrutable cien por cien, porque no se trata del viaje del héroe, aunque sea una película de origen, se trata de un niño casi adolescente, solo en este terrible y duro mundo, que merced a una palabra mágica puede hacerse mayor en cuestión de segundos y tener increíbles superpoderes… Una premisa molona que todos alguna vez en nuestra niñez quisimos vivir..
Y esa premisa nos recuerda indirectamente algo muy marvel, que todo poder conlleva una gran responsabilidad, de esta forma Billy Batson, tras unos inicios bastante circenses de su andadura como superhéroe entenderá quienes son su verdadera familia y luchará por ellos como el gran paladín que el mago de la Roca de la Eternidad ha visto en él.
Y todo héroe ha de tener un gran villano a su altura, y si Zachary Levi lo borda y disfruta en su papel de Shazam, también lo borda Mark Strong en su papel del Doctor Sivana, que no deja de ser otro niño atrapado en el cuerpo de un adulto, atrapado en el recuerdo de lo que no pudo conseguir cuando sucumbió en su niñez a la codicia, lo que de adulto le lleva a hincar la rodilla ante unos demoniacos siete pecados capitales.
Son dos horas de película que se pasan rápidamente, tal vez por la trama, tal vez por la comedia, los momentos heróicos, tal vez esas claras referencias a Big a cada instante de la cinta, tal vez porque bebe constantemente del cómic escrito por Geoff Johns durante los New52 y dibujado por Gary Frank, o tal vez por todo como si de un buen cóctel se tratase.
Y es que me gustaría encontrar un punto negro en “Shazam!”, pero oye.. yo pienso que no lo tiene, primero porque me hizo feliz ver como Freddy y Billy testean los poderes de Shazam durante unos memorables minutos que me recordaban y de qué manera a William Katt y a Robert Culp muchísimos años atrás en la divertida serie “El Gran Héroe Americano”, y segundo porque me encantó ver a la Familia Marvel en action live.
Y sí, hay cameo de Superman, y no me refiero al cameo de Superman al final de la película cuando Shazam y el Hombre de Acero acuden al comedor de la escuela a almorzar con Freddy. Para mí toda la película es un cameo de Superman, no en vano, hasta la irrupción de Shazam, el héroe favorito de Freddy es Superman… Si os fijáis su mochila del colegio lleva la S del Superman New52, y sus camisetas (remeras en Latinoamérica) llevan el emblema del Superman de Henry Cavill. Y salen muchísimas veces durante toda la película, por eso digo que Superman tiene un cameo continuo durante las dos horas.
En definitiva, si aún sois de ese grupo que aún duda en dar una oportunidad a “Shazam!”, mañana mismo deberiáis acudir al cine, porque el Gran Queso Rojo ha irrumpido en este universo heróico con muchísima fuerza y para quedarse en él, así que ya sabéis…
Gritad con fuerza “SHAZAM!” y convertíos de nuevo en el niño que lleváis aún dentro de vosotros.
NON.
