Cuando al final de Superman IV nuestro héroe le dice a Lex Luthor «Nos veremos dentro de veinte años» ninguno de nosotros pensamos hasta qué punto aquella frase se volvería profética, hoy viajamos a los primeros años de la década del siglo XXI para hablar de Superman Returns.
ANÁLISIS
A finales de la década de los 90 Warner Bros. tenía una «pequeña obsesión»: llevar nuevamente a Superman a la cúspide sus éxitos, ya fuese en series de televisión, en dibujos animados o cómo quiera que fuese, obviamente también en la gran pantalla aunque eso nunca llegó a concretarse.
Los intentos fueron muchos y muy variados, empezando por los Salkind que tras el «éxito» de su Superboy quisieron subirse nuevamente al carro del héroe proponiendo que el protagonista de la serie Gerad Christopher se convirtiera ahora en Superman tras la negativa de Reeve para hacer Superman V.
Los Salkind obtuvieron un rotundo no y Jon Peters productor de Batman y a la vez peluquero de Barbra Streisand recibió un encargo por parte del estudio: realizar una película que adaptase en cierta medida la Muerte de Superman, para ello se junta con el ínclito Kevin Smith que recibe una serie de directrices un tanto absurdas como que el kryptoniano se enfrentase al final contra una araña gigante (véase que esta obsesión de Peters se llegó a materializar en la película Wild Wild West) y por azares el encargo llegó a manos de Tim Burton que al ver el guión recurre al guionista de Batman Vuelve para una reescritura radical lo que provoca la salida de Smith del proyecto.
A Burton se le marca una directriz: Nicholas Cage, actor de numerosas películas de acción de la época sería Superman. Con esta obligación se realizan pruebas de cámara, pero Warner Bros. viendo que la fecha programada para el estreno se aproximaba peligrosamente no ve claro nada y termina cancelando el proyecto pagando una fortuna al propio Cage y también a Tim Burton al que le asegura el rodaje de «El Planeta de los Simios».
Ya entrados en el nuevo siglo Warner Bros. vuelve a la carga con la intención de partir de cero. ¿El encargado? J.J. Abrahams que plantea una trilogía del héroe con cambios absolutamente radicales en la mitología del Último Hijo de Krypton. Pero nuevamente todo vuelve a fracasar al no dar con el director adecuado ya que ninguno de ellos veía claro ese guión. Finalmente, Brett Ratner, director de «El Dragón Rojo» daría el sí trayéndose con él a Anthony Hopkins como Jor-El.
¿Os dije ya que por aquél entonces en Warner Bros. había unas luchas de poder que Juego de Tronos al lado de esto era un juego de niños? Pues bien, una de esas candidaturas a presidir el Estudio que después se llevó el gato al agua tenía su propio proyecto de Superman, y no era otro que hacer una película en la que Superman y Batman, sus dos buques insignia, se pelearan en una película. De esta forma el proyecto de Abrahams se confrontó al otro en el que ya se había puesto a Wolfgang Petersen (Troya).
Llegados a ese punto se tuvo que escoger una opción y se decantaron por Abrahams a pesar de que el proyecto de Petersen ya tenía actores buscados, pero este proyecto naufraga al no ser capaces de encontrar protagonistas para la película.
Alan Horne, el nuevo presidente de Warner Bros. continúa pensando en esa película de Superman y se reune con Bryan Singer y le muestra el guión de Abrahams, el cual le espanta. Fechas después Singer le comenta a Horne que debería ser más práctico e ir a por lo que siempre funcionó: el Superman de Reeve y Donner. Horne no se lo piensa y encarga a Singer un esbozo de película y un guión que sería la gestación de Superman Returns.
Y ahora sí, tras esta puesta en antecedentes vamos con la película… ¿Estamos ante una secuela? ¿Es un remake? Singer envió su guión a Donner que dio el visto bueno, sobretodo viendo que liquidaban Superman III y Superman IV, pero se cometen varios errores de casting, ya que si esto era una secuela los actores escogidos para dar vida a los protagonistas eran excesivamente jóvenes, en especial Kate Bosworth (Lois Lane) y un Brandon Routh que años después fue un sensacional Superman en el crossover televisivo Crisis en Tierras Infinitas, pero que en aquellos momentos fue el actor que interpretaba a Christopher Reeeve interpretando a Superman (no sé si me explico).
Para Lex Luthor se contrató a un actor solvente donde los haya, Kevin Spacey, pero si antes dijimos que Brandon Routh interpretó a Christopher Reeve interpretando a Superman, el bueno de Spacey interpretará a Gene Hackman interpretando a Lex Luthor.
No profundizaremos en relatar la trama, pero si diremos que Superman tras veinte años de ausencia en las pantallas, volvió absolutamente meláncolico (colores del super traje incluidos), después de cinco años por el espacio vagando a ver qué queda de Krypton, con un hijo al que no conoce criado por otro hombre, ah, y con Lois Lane odiándolo profundamente, y el mundo habiendo pasado olimpicamente de él. Vaya regreso, ¿verdad?
Y decía antes que uno no sabe si es secuela de Superman II o remake de Superman The Movie, porque basicamente el argumento es el mismo, con Lex Luthor con más ansias de tierra que un terrateniente. Con un guión que en ocasiones se extiende hasta el bostezo en ciertas escenas, que los últimos quince minutos de película tiene a Superman metido en la cama de un hospital, con unas tramas amorosas que parecen en ocasiones de culebrón turco y que sólo se salva, bajo mi punto de vista, por la escena del rescate del avión.
Todo esto llevó a la película a no sacar buena nota en taquilla, tanto es así que Warner Bros. dio carpetazo a la secuela de Superman Returns y el héroe volvió a volar lejos hasta la llegada del DCEU.
Odiada por muchos adorada por otros, el caso es que en 2006 tuvimos esta película llamada Superman Returns.
Saludos cordiales.
Non.